Proyecto de cocina en el que la funcionalidad y optimización de la capacidad se convierten en criterios fundamentales para un uso y mantenimiento adecuado.

La integración de equipamiento (zona de lavado/limpieza y almacenaje general) se han planteado de manera práctica para conseguir la mejor sensación y orden del espacio disponible.

El pavimento de gran formato junto a las superficies de apoyo, ambos en material porcelánico, son aptos para una utilización exigente y mantenimiento adecuado.

Visualmente la tonalidad neutra y variedad de texturas armonizan para lograr un equipamiento equilibrado, con luminosidad natural suplementada con iluminación directa sobre la superficie de encimera.